Si buscamos en el diccionario la definición de la palabra “personalidad” encontraremos lo siguiente: Conjunto de características o cualidades originales que destacan en algunas personas y las diferencian de las demás. Dicho esto, está claro que podemos aplicar esta definición no solo a las personas sino también a los espacios y ambientes que por una cuestión u otra marcan la diferencia sobre los espacios más convencionales y esto siempre es el reflejo del estilo de quien decora, así que no me negaréis que este rasgo es más que importante en el mundo del interiorismo. ¿Por qué os digo esto? Porque hoy en el blog os hablare de salones con personalidad, para inspirarse, de espacios diferentes, de ambientes que hablan de nosotros, de nuestro espacio más privado, en definitiva que hablan de cómo somos y como nos gusta vivir. Para ello he escogido cuatro salones con los que quizás os sintáis identificados, uno de inspiración clásica, otro urbano, uno de diseño y por último uno más chic. Vamos a ello!!
Cuando hablamos de salones de estilo clásico con personalidad, me refiero a un espacio que desborde genialidad, en una mezcla exquisita de texturas y acabados, de maderas nobles y piezas de anticuario, de paredes de ladrillo visto y lámparas de araña, en fin que se aleje de convencionalismos y hable de cómo el paso del tiempo embellece las piezas y las llena de historia para regalarnos interiores tan exquisitos como éste.
Los salones urbanos se caracterizan por su funcionalidad y versatilidad. Son espacios multiusos, muy vividos, con muebles de líneas rectas que se alejan del puro diseño para convivir con piezas de herencia familiar, que buscan la calidez a través de los textiles, alfombras y lienzos, en definitiva son espacios muy personales llenos de encanto.
Si nos decantamos por un salón de diseño con notas minimalistas la elección del color es fundamental, las gamas de grises y negros combinadas con madera clara marcarán su carácter actual y cosmopolita. Igualmente las superficies lisas de hormigón y cristal ayudarán a potenciar este efecto. Recordar que estos ambientes se identifican con la expresión “menos es más” para conseguir un resultado único.
Por último los salones chic con más personalidad se visten de atrevimiento y osadía, de color y texturizados tanto en paredes como en atrezzos en una mezcla en perfecto equilibrio entre el presente, el pasado y el futuro decorativo, vamos que son el reflejo de la más rabiosa actualidad.
Ah!! Si un consejo os puedo dar es que si sabéis lo que queréis, pero no acabáis de encontrar la manera de cómo transmitir vuestra personalidad, os dejéis aconsejar por un especialista en decoración.
