La llegada de un hijo a nuestra familia es la cosa más maravillosa que nos puede pasar, por ello no descuidamos ningún detalle de su nuevo dormitorio. Un espacio que sufrirá múltiples transformaciones conforme éste vaya creciendo. Así que aquí van mis sugerencias e ideas para habitaciones infantiles.
En un principio con una cuna o moisés, cambiador, armario y sillón será más que suficiente, un espacio delicado pensado para los mimos, el descanso y los sueños.
Con el tiempo sustituiremos la cuna por una o varias camas infantiles y eliminaremos el cambiador manteniendo el sillón que nos permitirá compartir con él lecturas agradables previas a acostarse. Es en este punto de su infancia donde es muy importante dedicar el máximo espacio posible de su habitación a la zona de juegos ya que pasarán gran parte de su tiempo dedicándolo a este menester.
Una cama nido siempre es una buena elección si no disponemos de mucho espacio, considerando la posibilidad que con el tiempo algún amigo pueda quedarse a dormir en casa compartiendo noches de aventuras y risas.
Más adelante, cuando nuestro hijo ya vaya a la escuela, debemos incorporar una mesa de estudio con una silla adecuada a sus nuevas necesidades, es entonces que por razón de espacio seguramente eliminemos el sillón.
Ya entrados en la adolescencia la habitación sufrirá un nuevo cambio, bueno y sus hormonas también, acordaros de esas paredes llenas de posters de nuestros ídolos o los recuerdos de aquellos campamentos de verano, entonces deberemos aprovechar al máximo el espacio incorporando un gran armario, estanterías y tecnología de última generación, ya sabéis ordenador, tablet, cónsola, pantalla led, etc..., aunque su mundo girará entorno a sus amigos y su móvil.
En fin, ya veis que como os comentaba los dormitorios infantiles son los que más transformaciones sufren, pero si prestamos atención desde un principio a su decoración y somos conscientes ello, podemos ir cambiando e incorporando piezas sin necesidad de hacer cada vez una habitación nueva.
