El deseo de muchos de vivir en un gran loft con espacios abiertos, se convierte en el privilegio de unos pocos afortunados que pueden disfrutar de un espacio tan original y extraordinario como el que hoy os muestro y que ha sido retratado por el fotógrafo Jordi Miralles. Su interior, una mezcla sublime entre lo ecléctico y lo industrial se vuelve más chic a cada imagen para regalarnos un interiorismo de lujo. Me encanta el ladrillo visto y el techo, así como la gama cromática escogida que potencia aún más si cabe la belleza de este impresionante loft. Espero que os guste tanto como a mí.
En el número 113 del Passeig de Gràcia, la calle más emblemática de Barcelona, en un edificio de estilo modernista construido en 1906, nace El Palauet Living Barcelona. El Palauet crea un nuevo concepto de vivir la ciudad para que nuestra estancia en Barcelona resulte una experiencia inolvidable. Piezas elaboradas en corian con retroiluminación inspiradas en elementos decorativos del edificio logran la fusión de lo contemporáneo con lo antiguo. Cada techo es diferente, hay casi una cuarentena y son todos patrimonio de esta espectacular ciudad. Baños y closets de última generación manufacturados a medida en corian, sábanas de algodón egipcio y cabezales de piel de gran formato son algunas de las características de este exclusivo lugar. Las puertas correderas son las originales y están artísticamente labradas con decoraciones de copas. Cada una de sus seis suites cuenta con al menos un balcón y el mobiliario, moderno y contemporáneo, ha sido diseñado por Warren Platner, Eero Saarinen, Knoll International, Philippe Starck, Antonio Citterio y Established & Sons entre otros. Con todo esto ¿quien se resiste a su encanto?
De esta casa, que publica este mes la revista Architectural Digest, me gusta la coherencia en la concordancia cromática que está presente en toda la vivienda, como habréis observado estoy hablando de las notas de color rojo. El rojo es símbolo de poder, se asocia con una actitud optimista de la vida y con la vitalidad. La verdad, esta casa derrocha todo esto y mucho más. Lujo sería la palabra que mejor define este espacio. ¿No creéis?
Imágenes con el consentimiento de Architectural Digest
