Un proyecto sorprendente
Este proyecto consiste en la restauración de un pequeño apartamento para uso turístico en el centro histórico de Mantua. El apartamento forma parte de una intervención de diseño que emerge en diversas actuaciones sobre el patrimonio local construido. Básicamente se trata de mantener juntos dos mundos, uno viejo y otro nuevo, en un equilibrio capaz de garantizar la identidad de ambos. En particular, el proyecto enfatiza las diferencias y las heterogeneidades de los espacios individuales, en los que la ambigüedad y la contradicción prevalecen en la unitaridad estilística. Los elementos mobiliarios se definen como objetos por un lado y refinados por el otro, una especie de bestiario que instituyen relaciones híbridas con los espacios únicos en los que se colocan. Los signos dejados por el tiempo, el trabajo humano y la intención estética de diferentes épocas permanecen, mientras que los nuevos signos se solapan entre sí en una complejidad que no anula los otros conocimientos. Así pues la belleza la encontramos en todas partes y no pertenece al valor intrínseco del material. Emerge en fragmentos en general, en formas evocadoras y en sus relaciones. Relaciones que tratan de mantener juntos lo opuesto, como la fuerza y la fragilidad, lo perfecto e imperfecto, el brillo de lo nuevo con la belleza de los materiales que cayeron en el abandono. Este mix representa una síntesis de todo. Espero os sorprenda y agrade tanto como a mí.
Imágenes con el consentimiento de Dwell