Casa de playa a todo color

Viendo el interior de este pequeño apartamento situado frente al mar, me lleno de energía. Su paleta cromática es una delicia, une con maestría dos colores muy estivales, el amarillo que bien podría representar el sol y el azul que está clarísimo que escenifica el mar. Juntos forman un interior vibrante y veraniego perfecto para una segunda residencia como ésta. Minimalismo y funcionalidad, que es de lo que se trata cuando pensamos en disfrutar de nuestras vacaciones, y a la vez un espacio que resulta cálido y vivido. Una casa de playa a todo color, un mix perfecto!!