La vivienda que hoy os presento en el blog es una mezcla de estilos un tanto singular, pero el conjunto me resulta extremadamente llamativo. El exceso y el ingenio decorativo redundan en un interiorismo atractivo repleto de obras de arte moderno, mezclado con muebles de época y una interesante combinación de colores que hacen que piezas tan dispares entre sí convivan a la perfección en un mismo ambiente. En fin, que para gustos colores que se dice, pero en este caso provocador de emociones, tanto a favor como en contra. ¿Verdad?
Imágenes con el consentimiento de Architectural Digest