Dicen que el color amarillo se asocia con el lujo puesto que su color se asemeja mucho al del oro, que despierta nuestra mente y nos ayuda a discernir y a tener las ideas claras. Es un color vital y por esta razón el interior de esta casa con notas de color amarillo me sugiere alegría, en fin que me transmite buenas vibraciones. Por una parte me resulta un punto excesiva, por otro algo austera, pero la combinación de estos dos conceptos tan antagónicos me ha enamorado. Y a vosotros ¿que os transmite?
Imágenes con el consentimiento de Architectural Digest