Para los amantes del estilo rústico hoy os presento un espacio urbano decorado con detalles que hacen que esta vivienda, lejos de parecer un piso, nos recuerde más a una casa de campo. Primera clave, usar muebles de madera natural, a ser posible de aspecto envejecido. Segunda clave, decantarse por textiles rústicos como el lino y el algodón tanto para tapicerías como para atrezzos del hogar. Tercera clave, usar pequeñas piezas rústicas como taburetes, cestas de mimbre, alfombras de fibras naturales. Y por último usar colores que estén en concordancia con la naturaleza, es decir, colores neutros y gama de verdes. Así de fácil ¿Os animáis?
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