El de hoy en el blog es un espectacular ático ubicado en la ciudad de Copenhague que a primera vista ya se advierte de estilo minimalista y austero en color. Me seduce la idea del “menos es más” y aquí esto es evidente. Los recuerdos de viajes a países exóticos aportan ese punto que rompe la simplicidad del minimalismo, un minimalismo que convierte en protagonistas los originales y monocromáticos cuadros que visten sus paredes y eso a mí me encanta. ¿Y a vosotros?
Imágenes con el consentimiento de Bobedre