Cuando la luz de hace dueña y señora de un espacio éste parece cobrar vida y esto es precisamente lo que ocurre en el apartamento que hoy os muestro ya que está abierto a la luz. El recibidor nos invita a disfrutar de un interior lleno de energía y luminosidad. Fresco, cómodo y sencillo este piso atrae las miradas, pero es en el dormitorio donde caigo rendida a sus encantos, sus grandes dimensiones, el gusto por los pequeños detalles y su atractivo balcón hacen las delicias de cualquiera ¿no creéis?
Imágenes: Alvhem