El tono gris empolvado que viste el interiorismo de este pequeño apartamento neoyorkino, cortesía de onefinestay, me encanta y lo hace precisamente por que me evoca un espacio industrial pero de reducidas dimensiones. Los detalles metálicos en puertas, ventanas y auxiliares han acabado seduciéndome por completo. El sofá de franela gris, la variedad de cojines estampados en tonalidades grisáceas como nexo común, el suelo de madera oscura y las paredes blancas lo hacen diferente y de lo más chic. ¿No creéis?
Imágenes con el consentimiento de onefinestay