Sabéis que siempre que tengo ocasión me gusta mostrar el trabajo de diferentes artistas con la intención de ayudar a difundir su obra. Carlos Vilches se considera un autodidacta, pero heredó de su padre la espontaneidad y el lenguaje pictórico que hoy lo definen. Quiero centrarme en una parte de su obra, concretamente la más abstracta. Le gusta jugar con la espontaneidad y la improvisación, pero siempre se deja llevar por su corazón, marcando éste el carácter de sus obras en función de sul estado de ánimo. Nos invita a un viaje a través del tacto y de lo irracional para converger en un profundo respeto hacia su trabajo. Os invito a visitar su web para que podáis conocer con más profundidad su obra.
Imágenes con el consentimiento de Carlos Vilches