Cuando la naturaleza en estado puro se cuelga de nuestras fachadas nos regala imágenes tan bellas como las que hoy os muestro. Casas de campo en una explosión de color y belleza sin igual, gracias a plantas que han decidido vivir sujetas a sus paredes, dotándolas de embrujo y belleza. Fachadas vestidas de naturaleza. ¿No creéis?