La exquisita luz que derrocha esta casa con sabor mediterráneo no hace más que acrecentar la belleza de este espacio. Tonos neutros para una casa mediterránea y es que fijaros en el suelo combinado con mármol y madera tanto en el salón como en el comedor o en el color gris claro de sus muebles al que se la ha añadido un toque de negro a través de pequeños detalles como por ejemplo el mosaico con dibujos geométricos de la cocina o el tapizado de las sillas. Pero la delicadeza se hace tangible en la habitación, decorada en un suave malva que enamora. ¿No os parece?
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